Conocido por su terreno accidentado y por la ferocidad de sus monstruos, Talandre es un lugar estratégico. Aquí están el pantano del Silencio, con su misteriosa niebla roja; los ricos depósitos de obsidiana de la forja Yunquenegro; el señorío Bercant y sus monstruos floridos y muchas más ubicaciones.
Kastleton es una ciudad llena de vida y mercaderes dispuestos a vender o comerciar con objetos, residentes que te ofrecerán información y soldados de la resistencia a cargo de la protección.
El bosque Carmín pertenece a Morokai el Traidor, el guardián de las arañas. Explora con cuidado, ya que se ha apoderado de toda la vitalidad del bosque. Ahora vaga por allí rodeado de arañas y solo ansía la vida eterna.
Las ruinas de Titanreach son todo lo que queda de un templo donde se crearon unos seres descomunales en el pasado. Sin embargo, no todo es lo que parece...
Una lluvia maldita contaminó el agua de esta zona y la convirtió en un desierto lleno de cobras y plantas carnívoras.
El castillo de Stonegard se alza en la ladera de una colina roma, horadada por miles de canteros del noroeste de Stonegard. La ladera contiene un intrincado laberinto de cuevas atestadas de nidos de basiliscos y mandrágoras. Los canteros que exploraron estas cuevas jamás regresaron.
En la mazmorra del Santuario del Anhelo te enfrentarás a los cuatro altares de la Llama, el Tsunami, el Tifón y el Terremoto. ¡Descubre quién será tu auténtico adversario!
En el hogar de la tribu de los reptiloides han crecido muchas flores venenosas de las que se alimentan, algo que les ha proporcionado resistencia al veneno. El Lago de la Regeneración se encuentra en la zona norte, y en el sur está el Cráter del Perecimiento, habitado por una tribu de reptiloides feroces.